EL EGO (LO REAL Y LO IRREAL)
El ego es el principal impedimento para que obtengas la santidad y
puedas ver realizadas todas y cada una de las promesas de Jesús en tu vida. En
este nivel ya haz conocido y estudiado bastante tu biblia, haz conocido muchas
de las promesas referentes a tu vida personal, familiar y matrimonial. El Señor
te ha convencido de que es capaz de realizarlas por amor a ti y a tu familia.
¿Recuerdas algunas promesas?
El Señor todo lo puede, para Él no hay
nada imposible, nunca te va a dejar, nunca te va a abandonar, tu esposo llegará
a sus pies a través de tu conducta, te bendecirá y bendecirá a tu generación,
te defenderá, peleará por ti, etc.
Una de las promesas que tu anhelas ver realizada en tu vida es que
PUEDE RESTAURAR TU VIDA, TU MATRIMONIO y lo hará, siempre y cuando tu cumplas
con las condiciones establecidas en su palabra para cada promesa. ¿Recuerdas
que lo estudiamos? Para cada promesa existe una condición, y si nosotras
queremos alcanzar la bendición que nuestro Padre promete forzosamente debemos
cumplir con la condición que ha establecido en su ley.
El fracaso de muchas mujeres es pretender ver realizadas estas promesas
en su vida y matrimonio sin pagar el precio que Dios exige para obtenerlas.
Aquí está la respuesta del porqué algunos matrimonios son restaurados y otros
no. En Dios no hay acepción de personas, ¡así que la restauración matrimonial
no depende de Dios sino de nosotras!
Ya hemos estudiado que la voluntad de Dios
es RESTAURAR, NUNCA el divorcio y la división que tanto aborrece. Él está y seguirá
siempre dispuesto a respaldar, otorgar poder, defender y pelear por una mujer
que tome la DECISIÓN de luchar por su hogar y afirma que no quedará
avergonzada.
Tristemente en la iglesia ha permeado el pecado y con ello un espíritu
de error, que lleva a muchas personas a creer que su felicidad está por encima
de la ley de Dios. La consecuencia se nota a simple vista, cuando vemos que
cada día hay más divorcios y desintegración familiar en nombre del “amor
propio” y la “gracia de Jesús”. Ya hemos explicado anteriormente este tema, por
ahora les digo que todo esto es consecuencia de lo que vamos a analizar el día
de hoy “EL EGO”, mismo que Satanás manipula para hacerte desistir y no cumplas
con la voluntad de Dios para tu vida y matrimonio (lo que Dios unió NINGÚN
hombre lo separe).
En el estudio anterior hablamos de “morir a nuestro yo (ego)” para
poder ser usadas por el Todopoderoso. Descubrimos lo que es el Ego. Ahora
forzosamente debes revisarte para saber el nivel de Ego que hay en ti y
renunciar a este de inmediato.
Características de una persona que tiene EGO o es ególatra:
1. Juzga a todas las personas.
Muchas juzgan a otras personas respecto
a cómo afrontan sus conflictos, si la gente no piensa igual que nosotros los
juzgamos. Pero la principal característica de juicio durante este proceso de
restauración matrimonial es PRETENDER conocer las intenciones de los demás,
sobre todo del esposo, por las acciones que OBSERVAN en ellos, entonces el EGO
a través de la imaginación utiliza argumentos para emitir un juicio “ si
llegaste tarde es porque seguramente andabas con otra”, “ya no me amas”, “no te importa nada”, “este hombre es de lo
peor”, etc.
Las “etiquetas” (juicio) que colocamos en otras personas hacen que
nuestra mente las procese como VERDADERAS, entonces nos predisponemos y
actuamos en base al juicio (imaginario) y no a la realidad.
La escritura afirma
que el Señor es el ÚNICO que conoce las intenciones del corazón de cada
persona, 1 Samuel 16:7 “Pero el SEÑOR le dijo a Samuel:
—No juzgues por su apariencia o por su
estatura, porque yo lo he rechazado. El SEÑOR no ve las cosas de la manera en
que tú las ves. La gente juzga por las apariencias, pero el SEÑOR mira el
corazón”. Entonces, quien pretende saber o conocer lo que hay en el corazón de
los demás, especialmente el del esposo ¡ESTARÁ PRETENDIENDO SER MAS O IGUAL A
DIOS! Debido a que Dios es el ÚNICO que conoce las verdaderas intenciones del
corazón de los hombres, solamente Él puede juzgar CONFORME A LA VERDAD, Romanos
2:2 “Por eso no tienes disculpa, tú que juzgas a otros, no importa quién seas.
Al juzgar a otros te condenas a ti misma, pues haces precisamente lo mismo que
hacen ellos. "Pero sabemos que Dios juzga conforme a la verdad cuando condena
a los que así se portan”.
2. Critica a todas las personas.
Es común que al sentir que cuentas con
la VERDAD ABSOLUTA, pretendas tener el derecho de corregir, criticar y dar
sermoneos de todo lo que los demás deben hacer o cómo se deben comportar. Esto
es sumamente PELIGROSO para ti y tú matrimonio si lo practicas con tu esposo.
La escritura nos dice que los esposos serán ganados para Cristo a través de
nuestra conducta SIN UNA SOLA PALABRA, comúnmente cuando aún hay rencor, falta
de perdón, celos, nuestro esposo y los demás lo notan por las palabras que
decimos. El Señor va más allá al decir que las palabras, en especial la
crítica, los insultos, etc. son lo que realmente contamina el espíritu 11 No lo
que entra en la boca contamina al hombre; mas lo que sale de la boca, esto
contamina al hombre.
3. Ataca a los demás.
La mayor evidencia del EGO es atacar a los demás
con toda clase de palabras o argumentos de auto justificación. Una persona
herida en su Ego se mostrará sumamente hostil hacia la persona que cree le ha
causado daño. La persona en su papel de “Victima”, se convierte en victimaria
llegando a agredir físicamente a su esposo, a la amante o incluso a sus propios
hijos. ¿Te has fijado en los perros cuando han sido muy maltratados? Atacan a
cualquiera que seles acerca, el dolor que sufre lo hace agresivo.
Esto mismo sucede con una persona que no ha sanado emocionalmente, el
dolor que experimenta le hace actuar en justicia propia hacia los demás. Vemos
como muchísimas mujeres a pesar de hacerse llamar cristianas, no han trabajado
todo esto y pronto son ellas mismas las que acaban por destruir totalmente el
matrimonio.
Una persona con estas tres características principales del EGO, se
vuelve insoportable, inclusive no se aguanta a sí misma ¿Cómo la soportarán los
demás? ¿Cuántas veces estas características te han traído consecuencias
devastadoras?, ¿Corriste a tu esposo de tu casa?, ¿Peleas interminables por
tener la razón y defender tu punto de vista?, ¿Has llegado a la violencia o a
agredir de tal manera que tu esposo se violente también llegando incluso a los
golpes?
El Ego, como ya hemos visto, es un EXCESO de autoestima, hace que te
sientas única, hace que pienses que tu problema es el más terrible, que
únicamente tu sufres, que nadie te puede entender, que todos te atacan o tienen
algo en tu contra, hace que creas que todo lo que dicen los demás es personal
hacia ti. En casos extremos, cuando esto no es tratado de forma adecuada, puede
existir paranoia o hasta psicosis. El Ego es totalmente IMAGINARIO, quiere
decir que es tu imaginación la que está trabajando aquí.
Una persona que actúa con estas tres características de Ego, pierde
proporción con la realidad, DEL YO” CON LO QUE REALMENTE ES, por el valor
excesivo de sí mismo.
El antídoto para que el Ego no nos cause problemas en las relaciones es la humildad:
Mateo 23:12” Porque el que se enaltece será humillado, y el que
se humilla será enaltecido”. Como hija de Dios debes entender que Él te ha
llamado para ser herramienta en sus manos para la transformación de tu cónyuge
y de tus hijos. Él nunca va a usar a una persona que aún tiene EGO.
Debes
entender que lo que realmente te duele de la traición de tu esposo, lo que dice
la gente, los problemas, es principalmente POR LO QUE TU CREES QUE MERECES, por
el valor que tú misma te has dado, pero eso es IRREAL. Reemplazas la realidad
de lo que realmente eres por lo que piensas que eres……..
“Yo no he hecho nada malo y mira cómo me paga mi esposo”
“Soy tan buena, que no merezco algo así”
“¿Cómo me hizo esto si soy la esposa?”
“Debe amarme sin condiciones”
“Él es el malo, el pecador, yo soy la víctima”
“Oro por él pero no cambia”
“Estoy cansada de sufrir”
“Yo sufro mientras mi esposo anda feliz”, etc.
Lo cierto hermosas es que, como
ya hemos estudiado, tú también has contribuido bastante para que tu matrimonio
se encuentre en esta situación. Cualquier argumento que te invite a desistir, a
darte por vencida proviene del EGO dentro de ti.
Hoy Dios quiere que inicies un camino de SANTIFICACIÓN en sus manos y
para ello debes MORIR TOTALMENTE a tus deseos. La palabra asegura que el poder
de Dios obrara en una persona que muera a su carne, a su “yo” Romanos 8:6
“Porque la mente puesta en la carne es muerte, pero la mente puesta en el
Espíritu es vida y paz”.
Si tú aún sientes “dolor” por lo que hace y dice tu
esposo o cualquier otra persona es porque tu MENTE está en tu carne, en tu
“YO”. Lucas 9:23-24 “Después les dijo a todos: Si alguno quiere ser discípulo
mío, OLVIDESE DE SÍ MISMO, cargue con su cruz cada día y sígame”. ¡OLVIDATE DE TI MISMA!, en estudios
anteriores hablamos de la depresión. Una persona deprimida es EGOLATRA, su
mente está ocupada en ella misma por lo que no puede ver las bendiciones a su
alrededor.
Comúnmente leo a muchas hermanas que, a pesar de estar orando, ayunando
y confiando ciegamente en lo que el Señor les ha dicho, siguen sufriendo por lo
que el esposo hace.
Imagina un cadáver frente a ti. Ahora imagina que lo pateas
con todas tus fuerzas ¿Qué hizo?, ¿Le dolió?, ¿lloró?, ¿Se quejó? No, ¡está
muerto!, lo mismo debes hacer con el ego dentro de ti ¡mátalo!, entonces
experimentaras todo lo que Dios desea poner en ti para restaurar tu matrimonio
sin que nada estorbe. El Señor ha permitido todas estas situaciones en tu vida
con este propósito: “tu santificación”.
Toma la decisión ahora mismo de
renunciar a este estorbo en tu vida para que el Poder de Dios opere en ti y
comiences a ver el milagro de tu restauración personal y matrimonial.
Recuerdo que no fue hasta que decidí renunciar a mi Ego que el Señor
empezó a tratar con mi esposo. El cambio es inmediato en ti, veras que el Señor
al instante te dará la paz que necesitas mientras pone todo en orden en tu
vida.
Hagamos esta oración:
Padre, te doy toda la gloria por tu bendita palabra. Necesito que tú,
por medio del espíritu santo me santifiques, me guíes a toda verdad. Perdóname
porque hasta hoy comprendo el mal que ha operado en mi vida. Te rindo mi
voluntad, renuncio a mi Ego, lo hare cada día hasta que tu poder se haga más
grande dentro de mí y aprenda a vivir con el espíritu de amor, paz y dominio
propio que me has dado. Deseo quitar este estorbo para ver todo tu poder
operando en mi vida y matrimonio. Ya no
deseo actuar en base a mi justicia propia, comprendo que era mi ego, mi orgullo
herido, la estima excesiva de mi misma, lo que me hacía sentir mal respecto a
lo que hacen los demás.
Comprendo que solo tú conoces el corazón de mi esposo,
de mis hijos. Tú sabes sus luchas y sus deseos, los conoces y amas al igual que
a mí. Nunca más pretenderé levantarme por encima de ti juzgándolos, desde hoy
los acepto tal y como son sin pretender cambiarlos. Tuyo es el poder y creo
firmemente que, así como estas cambiando mi corazón de piedra por uno de carne
para que siga el rumbo que tú le traces, lo harás con mis seres queridos. Yo me concentro en tu Reino, en tu justicia y
confió en que lo demás será añadido. En el nombre de Yashua H. Amén
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